Según estudios publicados en los últimos años por la Organización Mundial de la Salud, las caídas son la segunda causa mundial de muerte por lesiones accidentales. Esta letalidad se ve acentuada en el colectivo de personas mayores. Se calcula que cerca de un 35% de las personas mayores se caen en casa por lo menos una vez al año, y que cada 5 minutos hay un ingreso hospitalario por este motivo. ¿Podemos revertir estas cifras? La respuesta es sí. La clave reside en la correcta prevención de nuestro entorno.
Evitar las caídas
Una caída en una persona mayor de 65 años casi nunca es «solo una caída». Por ese motivo es crucial atajar el problema de raíz y prevenir la caída antes de que suceda. Para ello hay que ser capaz de reconocer los posibles factores de riesgo. Algunos son más obvios que otros, pero es necesario recordarlos cada día para que no bajemos la guardia nunca:
Prevenir depende de todos
¿Cómo podemos revertir estos porcentajes entre todos y todas? Quizás pensemos que si no somos grupo de riesgo no debemos preocuparnos por ello, sin embargo, la prevención de nuestros mayores es un asunto de todos. Es toda una operación que conlleva implementar estrategias preventivas, la capacitación de los adultos mayores y la creación de entornos más seguros, dentro y fuera de sus casas. Conocer las medidas de prevención de caídas y sus múltiples casuísticas puede salvar vidas.
Los servicios de teleasistencia para personas mayores tienen como objetivo mejorar la calidad de vida de todos los usuarios, facilitando su entorno social y fomentando su seguridad. Es una medida de prevención eficaz ya que asegura una intervención inmediata en casos de crisis para evitar riesgos innecesarios. La teleasistencia aporta tranquilidad tanto a las personas mayores como a sus familiares, sabiendo que el usuario estará atendido por profesionales en todo momento. Una protección tanto fuera como dentro de casa siendo una de las medidas más competente para evitar caídas en personas mayores.